Cuando trabajé en Sierra, añadían una constante fija (creo que era el 125%) a los salarios para cubrir los impuestos, los seguros, la administración y otros gastos generales.
En la década de 1990, la mayoría del software se distribuía en soportes físicos, por lo que el coste por unidad también incluía los materiales, la duplicación, la impresión, el almacenamiento y …