Sí, se puede. Hay dos maneras de hacerlo: captura de vídeo, y streaming de vídeo.
El streaming de vídeo es la opción más barata, pero también produce resultados menos que estelares. Tanto la Xbox One como tu ordenador con Windows 10 (SÓLO Win10) deben estar en la misma red local, y ser visibles entre sí en la red. (Los resultados de calidad requieren al menos una conexión Wi-Fi N o AC de alta velocidad, pero realmente quieres una conexión Gigabit Ethernet por cable entre los dispositivos). Si tu cuenta de autologin en tu Xbox One es también tu cuenta en tu ordenador, puedes incluso hacer que tu Xbox se encienda desde tu PC.
También necesitas la aplicación de Xbox en la Microsoft Store instalada en tu ordenador. (Es una de las pocas aplicaciones preinstaladas con Windows 10.) Puede que haya que hacer algunos ajustes de configuración, y el mando debe ser un mando de Xbox One, incluso si está conectado a tu PC en lugar de a tu Xbox.
Otro inconveniente es que la transmisión del juego a Mixer y la grabación del juego están desactivadas mientras se transmite al PC. También suele haber un lag importante, pero de menos de medio segundo. Suficiente para matarte en una partida multijugador, pero no tan malo para un solo jugador.
La captura de vídeo proporciona resultados mucho mejores, pero es más costosa. Además, no puedes usar la entrada del mando desde el PC como puedes hacer con el streaming. Sin embargo, puedes transmitir a Mixer directamente desde tu Xbox, pero casi siempre es mejor cargar la transmisión desde tu ordenador.
La captura de vídeo requiere un equipo especializado (como este dispositivo USB 3.0 de Elgato o esta tarjeta PCI-Express x1 de Hauppauge) que suele costar al menos 100 dólares, y suele requerir software adicional (los dispositivos suelen venir con este software, pero OBS Studio es una buena alternativa gratuita).
El retardo de vídeo también es mayor que el de la conexión directa a tu pantalla, pero se basa en gran medida en el retardo de procesamiento de tu ordenador. Suele estar muy por debajo de los 16ms, pero los ordenadores especialmente lentos o el juego en 4K pueden hacer que la cantidad se dispare.
En resumen, si tienes el dinero, deberías comprar un dispositivo de captura de vídeo basado en HDMI para transmitir tu juego. Si no puedes permitirte un dispositivo de captura, o quieres transmitir a una habitación diferente a la de la Xbox, el streaming es tu mejor opción.