¿Por qué ha fracasado Windows 8?
Windows 8 fracasó por una serie de razones.
Probablemente la razón principal fue que Microsoft perdió de vista el mercado corporativo. Las empresas que pueden tener 20′000 empleados todos trabajando con Windows. Windows 8 era tan diferente a Windows 7 desde el punto de vista de la usabilidad, que fue un cambio duro. Cosas que eran intuitivas para el usuario (aunque no fueran la forma más rápida o eficiente de hacer algo) de repente ya no funcionaban como antes. La gente estaba atascada tratando de averiguar dónde habían ido a parar los ajustes de repente. ¿Qué es eso de «deslizar hacia abajo»? Estoy usando un portátil con un ratón. ¿Dónde está el botón de «cerrar» en la parte superior derecha de mi ventana? De hecho, ¿dónde coño se han metido mis ventanas?
Fue un desastre, y lo digo desde la perspectiva de un formador de Windows y Office con unos 30 años de experiencia docente. Era una pesadilla para enseñar. ¿Por qué? Porque todo el mundo lo odiaba. Porque era tan diferente… que no podían trabajar. Piénsalo por un minuto. Coge un banco, una compañía de seguros… De repente no pueden procesar las reclamaciones, porque no pueden averiguar cómo llegar al Explorador de Archivos… ¡Desastre!
Así que la mayoría de las empresas echaron un vistazo a Windows 8 y dijeron «¡Diablos, no!»
Microsoft, supongo, lo apostó todo a que la gente gravitaría hacia el uso de tabletas y dejaría de lado sus toscos portátiles, cosa que no ocurrió. Yo uso un iPad, uso un híbrido portátil-tableta-transformador con una bisagra en la parte trasera y una pantalla táctil. Pero si tengo que escribir un manual de 150 páginas, lo hago con el portátil. Que le den a la tableta y a la pantalla táctil: necesito velocidad.
Para cuando salió Windows 8.1 (otro error: yo lo habría llamado «Windows 9» para que la gente se diera cuenta de que era algo muy diferente a Windows 8), la gente le había dado la espalda colectivamente a Windows 8. Nadie estaba interesado en otra iteración de Windows 8. 8.1 sonaba como un Windows 8 ligeramente actualizado, ¿verdad?
Pero no lo era. Era la re-laboralización de Windows 8. Windows estaba de vuelta. El funcionamiento familiar de Windows a través del ratón estaba de vuelta. Diablos, hasta el menú de inicio había vuelto. Pero habían perdido su base corporativa.
La han cagado. Siento ser contundente, pero Windows 8 no fue un éxito. Windows 8.1 era mucho mejor, y si hubieran pasado de Windows 7 directamente a lo que eligieron llamar Windows 8.1, las cosas habrían sido diferentes. Pero tal y como están las cosas, tienen que cavar un pozo profundo y meter subrepticiamente a Windows 8 en ese pozo profundo junto a Windows Vista y taparlo rápido.
En una nota más positiva, Windows 10 es realmente agradable. Agradable de enseñar, agradable de usar. Hicieron un gran trabajo con Windows 10 y estoy de vuelta a bordo, recuperándome de los raspones y moretones que recibí tratando de enseñar Windows 8.