En primer lugar, es importante tener en cuenta las diferencias en el uso de los televisores y los monitores. Los televisores muestran principalmente programas de televisión, películas y videojuegos. Los monitores se conectan principalmente a los ordenadores, que necesariamente muestran mucho texto: documentos, sitios web, correo electrónico, menús de software, etc. Evidentemente, hay algunos cruces (se puede conectar un ordenador a un televisor para navegar por la web y se puede ver una película en el monitor de un ordenador) pero, en general, esas son las cosas para las que están diseñados los dispositivos.
Debido a que los ordenadores trabajan mucho con texto -y a menudo con texto bastante pequeño- y a que la gente se sienta más cerca de los monitores de los ordenadores que de los televisores, los monitores deben producir una imagen muy nítida para que ese texto sea lo más legible posible. Esto significa tener una densidad de píxeles muy alta, que se puede medir en PPI (píxeles por pulgada).
Mi monitor de 22″ funciona a 1080p (1920×1080), lo que supone aproximadamente 100 PPI. Sentado a un brazo de distancia de la pantalla puedo leer fácilmente un texto tan pequeño como 6pt. Ahora comparemos eso con un televisor de 43″ a 1080p. La imagen será más grande, pero los PPI bajan a 51. Las películas y los videojuegos seguirán viéndose bien, pero el texto será mucho menos nítido, haciendo que algunos textos pequeños sean casi ilegibles. Un televisor de 43″ a 4K (3840×2160) alcanza los 102 PPI, lo que es comparable a mi monitor, pero cuanto más grande sea, más nitidez perderá. Para mantener esa misma nitidez de ~100 PPI en tamaños más grandes, los televisores tendrían que utilizar resoluciones de pantalla más altas que aún no se han inventado (o al menos no han llegado al mercado de consumo; por ejemplo, el 8K está por llegar).
Así que esa es la razón principal, y se refleja en gran medida en los precios de los dos productos. Hay una razón por la que los monitores de ordenador suelen costar más que los televisores con tamaños de pantalla similares: porque casi no hay televisores <32″ que no sean 720p, así que cualquier monitor de 20″-27″ 1080p+ tendrá una pantalla inherentemente mejor.