No vas a poder combinar sus memorias RAM ni juntar las tarjetas de vídeo para que salgan a un solo monitor. Cada CPU está conectada a su RAM a través de un bus de muy alta velocidad. Si la CPU del PC 1 necesitara datos que estuvieran almacenados en la RAM del PC 2, no tendría disponible esta conexión de alta velocidad y el tiempo que tardaría en cargar los datos en los registros de la CPU sería atroz. La misma situación se da con las tarjetas de vídeo y otros periféricos conectados a cada ordenador.
Lo mejor que puedes hacer para aprovechar los ciclos de la CPU y la RAM del segundo PC es utilizarlo como servidor/ordenador sin cabeza (uno sin monitor propio). Puede hacer un escritorio remoto o SSH en él desde el ordenador principal, y hacer que realice tareas en segundo plano mientras su PC principal se utiliza para otras cosas. Esto también puede hacer uso de la tarjeta de video remota, pero debido a la baja velocidad de la conexión de video, esto es más útil para cosas como el renderizado a un archivo o CUDA que para mostrar gráficos en vivo (no querrás intentar jugar a través del Escritorio Remoto). El almacenamiento es aún más sencillo, puedes abrir el almacenamiento del segundo PC a la red y usarlo además del almacenamiento local.
Si tienes aplicaciones que puedan hacer uso de la computación distribuida (digamos, una granja de renderizado), entonces puedes hacer uso de ambos ordenadores de esa manera, pero esto está limitado a ciertas tareas que se paralelizan bien.