Puedes alojar un sitio web desde tu ordenador con bastante facilidad. Hoy en día hasta los hornos tostadores tienen servidores web en ellos (hornos tostadores de lujo).
Los problemas a los que te enfrentarás (y yo lo he hecho) son solucionables, pero aquí están:
- ¿Puedes garantizar que tu ordenador se mantendrá siempre encendido?
- ¿Es de suficiente calidad como para soportar estar encendido todo el tiempo? (eso no significa que tenga que ser nuevo, yo tuve un 486 de los años 90 que funcionó durante muchos años, simplemente los hicieron mejor entonces)
- ¿Está tu internet encendido todo el tiempo?
- ¿Está el ordenador conectado a internet de forma fiable todo el tiempo?
- Dependiendo de lo que vayas a servir, ¿tienes el ancho de banda de subida de sobra para ello?
Ahora vamos a la parte del cómo. Consta de dos partes
- Alojar un sitio web en el ordenador
- Asegurarse de que la gente de Internet pueda verlo
Poner en marcha un servidor web
El sistema operativo más fácil para alojar un servidor web es Linux. Además es gratuito. Para la mayoría de las distribuciones, basta con instalar Apache o lo que sea para ponerlo en marcha con bastante facilidad. También depende de lo que quieras servir. Si hay algún contenido dinámico, también puedes programar en Linux para la mayoría de los lenguajes. A menos que quieras C# u otras cosas de Microsoft, entonces obviamente necesitas Windows. Yo iría con lo que estás más familiarizado.
Una vez que lo tengas instalado y todo, probablemente la mayoría de los ordenadores de tu red doméstica podrán acceder a él en la dirección IP local.
Haciendo que se vea
Primero tienes que asegurarte de que tu ordenador tiene una dirección IP fiable en tu red. La mayoría de los routers le permitirán reservar una dirección IP una vez que haya sido otorgada automáticamente.
A continuación, tiene que establecer un reenvío de puertos, donde todo el tráfico web (normalmente el puerto 80) que entra en su router se reenvía a su servidor web.
A continuación, puede probar desde una ubicación externa de Internet yendo a su dirección ip externa con un navegador web.
¡Ahí! Y probablemente quieras configurar un nombre de dominio y apuntarlo a esa dirección IP. El punto pegajoso aquí es que esa dirección IP puede cambiar. Hay un truco ahí, llamado DNS dinámico y la mayoría de los routers pueden hacerlo, donde informan a un servidor DNS cuando cambian su dirección IP, pero puede que necesites simplemente buscarlo en Google 🙂
Espero que haya sido útil.
A la larga, si te lo tomas en serio, suele merecer la pena el coste no tan elevado de conseguir una porción de web en algún sitio para no tener que preocuparte de que tu madre/gato/mujer/amigo desenchufe el servidor web para usar el horno tostador.