Todos tienen funciones diferentes.
En orden de lo que tienes que pagar para tener el puerto en tu tarjeta de sonido:
Lo más básico que necesitas es la salida de línea, que’s para conectar altavoces estéreo o auriculares (verde).
Luego suele haber una entrada de micrófono (normalmente rosa).
También suele haber un conector interno para el micrófono y la salida de línea (a veces con amplificador especial para auriculares) para conectar los conectores del panel frontal de la caja de tu ordenador.
Luego está la entrada de línea (azul) donde puedes conectar otro dispositivo de audio (otra tarjeta de sonido, un reproductor mp3, un equipo de música…), la diferencia con la entrada de micrófono es que la entrada de micrófono tiene un amplificador.
Esta es la configuración más básica que tendrás.
Los puertos negros, naranjas y grises son para el sonido envolvente (subwoofer, centro izquierdo/derecho, trasero izquierdo/derecho), en algunas tarjetas de sonido integradas la línea de entrada se duplica como una de las salidas de sonido envolvente.
Si paga aún más obtendrá una salida digital. Por lo general, un RCA (cable) y Toslink (fibra óptica). Son conexiones digitales que permiten transmitir la señal de sonido sin introducir ruido.
A menudo puedes encontrar pequeños dibujos grabados que muestran la función de cada puerto. También puedes encontrar la función de cada puerto en el manual.
Si todo eso falla hay controladores de tarjetas de sonido que detectan cuando se conecta un cable y abren un diálogo en pantalla preguntando qué tipo de dispositivo has conectado.